La llegada del verano además de traernos el calor, la playa y
las vacaciones, nos deja la visita de unos bichitos que nos acompañan y nos
molestan sobradamente. Estos insectos (moscas, mosquitos, hormigas…), nos hacen
la vida imposible, sobre todo por la noche cuando intentamos conciliar el sueño.
Existen muchísimos productos en el mercado que a veces tienen
un olor insoportable. Se usan como repelentes y como se dice por mi tierra, “es
peor el remedio, que la enfermedad”, porque muchos de ellos provocan alergias y
resultan perjudiciales para el medio ambiente.
¿Cómo podemos combatirlos?
Evitando que entren en casa. Para ello existen esas famosas mosquiteras que realizan bien
su función, aunque estos bichitos a veces las burlan.
Para las hormigas, importante no dejar comida fuera de los
muebles y del frigorífico. Se dice que si depositas un poco de cúrcuma o
pimienta junto a las puertas, evitamos que entren.
Que hacer cuando ya han entrado.
Si no hay más remedio
pues un buen aerosol o esos aparatos eléctricos que venden en los supermercados.
También podemos quemar velas de
citronella o quemar incienso. Yo descubrí que si pongo bajo la ventana bálsamo
de dragón, estos se mantienen fuera de la habitación También podemos adquirir esas
pulseras que contiene repelente, aunque a mí me cuesta dormir por el
fuerte aroma que despiden.
Existen plantas aromáticas que actúan como repelente natural
a la vez que dejan un bonito olor en
nuestra casa. Hablamos del romero, albahaca, hojas de eucalipto, laurel,
lavanda y salvia entre otras.
Otras plantas conocidas que actúan como ahuyentadores de mosquitos y
que resultan ideales para colocar en el exterior de nuestras
ventanas o en las jardineras son: el clavel chino, el jazmín o el geranio
limón.
Todo es probar. Espero que os resulte útil y paséis buen
verano lejos de estos indeseables bichitos.
