Foto procedente de pixabay. Autor:OpenClipartVectors |
Empieza septiembre, de repente tu día se vuelve una carrera vertiginosa y te falta tiempo para todo. Vas de un lado a otro con la sensación de que en cualquier momento todo puede convertirse en un caos, ya que faltan horas al día para hacerlo todo. Para ello, nada mejor que emplear unos instantes a la semana para planificar y optimizar el tiempo. Seguro que arañando algunos minutos, lograremos hacer todo lo que nos propongamos en el día.
La agenda:
La agenda es algo muy personal, ya que dependiendo de nuestra actividad, tendremos que elegir un modelo u otro. No es igual una agenda personal, que una agenda donde tengamos que reflejar nuestro trabajo con nuestra vida diaria. Es una herramienta que me ayuda a llevar el día y no el día llevarme a mí. El tamaño importante, no es cuestión de llevar en el bolsillo una de tamaño libro del Quijote. Yo, utilizo una de tamaño de una mano aproximadamente y anoto los detalles principales, cumpleaños, citas y también me ayuda para tener en cuenta los trabajos y aspectos importantes de la escuela de los niños. Eso sí, sabiendo que no somos sus secretarios.
En cuanto a las agendas escolares. Prácticamente todos los niños utilizan una, es una forma de aprender a organizarse. Ahí deben anotar tanto los deberes, notificaciones y mensajes entre padres y alumnos. Actualmente son bastante completas, tienen mucha información, son sencillas de manejar y a los padres nos permite hacer un seguimiento diario del rendimiento escolar.
El planning :
Si ya la agenda es de vital utilidad para mi, el planning es mi mejor aliado. En él anoto la mayoría de actividad de la casa. La comida de la semana, citas, cumpleaños y aquello que no se debe olvidar. Lo suelo sujetar con un imán en el frigorífico, de forma que me sea fácil visualizarlo.
El horario:
Ahí anoto las actividades programadas para largo tiempo de todos los miembros de la casa: las extraescolares de los niños, el gimnasio, las clases de yoga… De gran utilidad y también lo coloco con un imán en el frigorífico, así toda la familia tiene acceso a la información ahorrando tiempo y resultando fácil de consultar. Los niños deben tener su propio horario con sus clases escolares y extraescolares en su habitación a la vista, bien en un corcho o menos estético en la puerta del armario.
Aunque de pereza eso de planificar, merece la pena puesto que en menos de media hora podemos tener una idea clara de todo lo que tenemos que hacer en la semana de forma clara y rápida. Intento que sea un día en que haya menos actividad y que me permita tener ese ratito concentrándome. Para mí el día ideal es el sábado en eso que estás en el café de la sobremesa y todo el mundo anda haciendo algo.
Hay muchas plantillas en Internet o bien si sois mañosos podéis hacerlo vosotros mismos en Word o Excel. Os dejo unos enlaces bastante interesantes donde encontrareis plantillas descargables.
http://michelzbinden.com/es/calendarios/calendarios-septiembre-2015-l.php
http://www.orientacionandujar.es/2011/09/01/planificador-semanal-para-alumnos-y-profesores/