Si quieres
triunfar con unas tapitas, no lo dudes, con las bravas triunfarás. Aunque ya
eran famosas en algunos lugares de la geografía española, ahora son las reinas
de las tapas junto con nuestra famosa tortilla. Son sencillas, inducen al vicio
puesto que si comes una, ya no paras y como no, anima a compartir. Muchos
sitios se disputan la primacía de esta receta, yo les dejo esta versión que es
la que normalmente hago.
INGREDIENTES:
4 patatas
medianas
Aceite de
oliva
Sal y
perejil
PARA LA
SALSA:
½ cebolla
1 diente de
ajo
4 cucharadas
de tomate frito casero
1
cucharadita de tabasco
Una pizca de
pimienta
1 vaso de
mahonesa
Aceite y sal
ELABORACIÓN:
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Pelamos
y cortamos las patatas en dados medianos y las cocemos en agua hirviendo con un poco de sal durante unos 10 minutos.
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Escurrimos
bien y freímos en abundante aceite.
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Ahora
mezclamos la mahonesa con el tomate, el ajo picado, el tabasco y la pimienta.
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Servimos
sobre las patatas muy calientes.
Ojo, ya os
comenté que aunque están buenísimas, en Madrid por ejemplo no se utiliza tomate
para la salsa. Sólo tenéis que investigar un poco y probar como os gusta mas.
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