Aunque su
nombre indica un origen italiano, la realidad es que se trata de un postre
típico de México. A la receta base le añaden café u otros ingredientes que lo
enriquecen todavía más si se puede. Yo voy a elaborar la receta base, que por
sí misma está riquísima. A destacar la textura, que ya se nota simplemente al
cortarla y sobre todo cuando lo llevas a la boca. Lo podéis comprobar.
INGREDIENTES:
4 huevos
1 lata de
leche evaporada tipo IDEAL
1 lata de
leche condensada
175 gr de
queso tipo Philadelphia
Una taza de
azúcar
1
cucharadita de esencia de vainilla
ELABORACIÓN:
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En
una sartén volcamos el azúcar y a fuego bajo dejamos caramelizar. Vertemos
sobre un molde, cubriendo bien las paredes.
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En
un bol batimos el resto de los ingredientes e incorporamos al recipiente que
contiene el caramelo.
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Tapamos
con papel de aluminio e introducimos dentro de otro recipiente con agua.
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Ahora
con el horno previamente calentado a 170º, introducimos y dejamos entre 45 minutos y 1
hora (depende del horno).
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Dejamos
enfriar y luego llevamos al frigorífico durante unas tres horas.